Sirve este nuevo CSL conceptual para celebrar, además, los 40 años de BMW en Estados Unidos y también los cuarenta años de los primeros éxitos deportivos de la firma bávara al otro lado del atlántico, donde el CSL original de 1975 logró sus primeras victorias pintado del color oficial de BMW M.
Esa misma librea ha sido empleada para vestir, con el dorsal 25, a este prototipo que, personalmente, diré que me entra por el ojo.
Estéticamente, el coche es poco más que una revisión algo radicalizada del concepto de Villa d’Este, con un alerón trasero «más de carreras» y llantas de nuevo diseño. Las aletas ensanchadas y musculadas siguen ahÃ, como también están los bultos sobre el capó delantero. Si el «batmobile» de los setenta tenÃa lÃneas rectas, el modelo actual juega con formas más orgánicas, pero trazar paralelismos entre ambos es muy fácil, logrando justo lo que los diseñadores pretendÃan, que es crear una reinterpretación moderna del diseño clásico sin recurrir a un ejemplo de coche «retro».
¿Y qué saldrá de todo esto? Pues lo mismo que del M1 Hommage: Probablemente nada. Es un bonito homenaje simbólico con el que impresionar y valorar impresiones del público, pero no esperes poder comprarlo en el concesionario más cercano.