El nuevo ST estará disponible también con tres y cinco puertas, como el modelo actual, aunque hay cambios sustanciales en el concepto mecánico. Recibe un motor 1.5 EcoBoost, una reducción de unos 100 cc. Cuando leí eso pensé «bueno, es un cuatro cilindros», pero no. Se trata de una nueva generación que tiene ese litro y medio, pero que pierde un cilindro.
No contentos con eso, los ingenieros de Ford le harán funcionar puntualmente en modo de dos cilindros, porque se desactivará uno en condiciones de baja carga. El comunicado de prensa asegura que cambia de modo en 14 milisegundos, pero que me aspen si no se va a notar el traqueteo de un motor desequilibrado funcionando con un cilindro menos. El cilindro «dormido» tendrá las válvulas cerradas para evitar pérdidas por bombeo.
Eso se puede entender en un ECOnetic o un pelado de gama, no en el modelo más deportivo. Acaba de subir instantáneamente la cotización de los Fiesta ST de sexta generación. ¡Aún se fabrica, estáis a tiempo, corred insensatos! Este motor nuevo viene con filtro de partículas que «reduce las emisiones de hollín». En otras palabras, lo genera, pero no se cae el «Eco» de «EcoBoost».
Venga, ahora hablaré «bien» del motor. Incluye doble sistema de inyección, es decir, multipunto y directa, como algunos motores de última generación. Eso permite funcionar en un modo u otro dependiendo del propósito (reducir consumo, mejorar prestaciones, etc). El diseño del turbocompresor ha buscado el menor recorrido de los gases de escape y admisión, en otras palabras, tiene una respuesta más rápida (como que el ST saliente la tiene perezosa…) Un efecto secundario es que el colector de escape se calienta antes, y eso tiene repercusiones positivas en la limpieza de gases de escape en los primeros kilómetros.
Los 200 CV se entregan al eje delantero a través de una caja de cambios de seis marchas y un diferencial libre con control vectorial de par. Dicho en cristiano, frenará selectivamente una rueda u otra para lograr el mejor paso por curva posible. Promete 290 Nm de par máximo y un 0-100 km/h de 6,7 segundos (previsión). El consumo homologado será menor a 5,3 l/100 km de gasolina, ojalá fuese verdad.
Resumiendo, para gastar casi lo mismo, correr lo mismo y contaminar casi lo mismo ¿dónde está la ventaja de capar un cilindro?
Incluye tres modos de conducción -Normal, Deportivo y Circuito- que alteran la respuesta de la dirección asistida, la sensibilidad del pedal del acelerador, el grado de intervención del ESP y el sonido amplificado del motor (de forma natural, no con altavoces). En el modelo actual solo se puede elegir el grado de intervención del ESP: normal, relajado y «a pelo». Desactivar completamente las ayudas seguirá siendo posible (pero poco recomendable).
La estética es importante en este tipo de coches. El Fiesta ST cuenta con una parrilla diferenciada, insignias «ST», la posibilidad de escoger el color Azul Líquido y llantas de 18 pulgadazas. Respecto al modelo previo será más personalizable, pudiendo poner al gusto de cada uno la palanca de cambios y el volante achatado en su parte inferior.
Al igual que el resto de la gama Fiesta, el sistema de infoentretenimiento es SYNC 3, compatible con Android Auto y Apple CarPlay, con pantalla de 8 pulgadas táctil. Los altavoces son de B&O, la marca «joven» de Bang & Olufsen (no requiere presentación). Llegará a los concesionarios el año que viene, así que hay que apresurarse a encargar un Fiesta ST200 antes de que dejen de fabricarlo.
Por cierto, las fotos están hechas en el techo de la fábrica de Colonia (Alemania), donde se fabricará en serie. En el mismo lugar han hecho un vídeo que no es que muestre mucho, pero resulta entretenido: un duelo contra una bicicleta por dentro de la fábrica.
