McLaren 720S, un canto a la perfección hecha coche

Hay que empezar por su impresionante motor, el M840T, uno de los 4.0 V8 más apretados del mundo: 720 CV y 770 Nm de par máximo. Tiene un 41% de piezas nuevas comparado con el 3.8 V8 anterior, sus dos turbos le permiten obtener 180 CV/litro, lo cual es una salvajada per se. La refrigeración de esta bestia está garantizada con las aberturas existentes en la carrocería, o eso dice McLaren, mejorando su aerodinámica. Por cierto, 720 es igual a 6 factorial (1*2*3*4*5*6).


El cambio es SSG de siete marchas, con propulsión trasera

Antes de hablar de eso, mención aparte tiene su peso. El habitáculo está hecho en fibra de carbono, algo que McLaren hace desde el lanzamiento del F1 en 1993. El material ultraligero se combina con mucho aluminio, resultando 1.283 kg en vacío, o 1.419 kg si se cuenta con todos los fluidos y el 90% del combustible. La relación potencia/peso más favorable es de 561 CV por tonelada. Otra salvajada. McLaren presume de un habitáculo espacioso y de maleteros suficientes: 150 litros delante, 210 litros detrás. Mejor que algunos compactos, oiga.

McLaren 720S, un canto a la perfección hecha coche

Las prestaciones os van a hacer flipar de lo lindo: 100 km/h en 2,9 segundos, 200 km/h en 7,8 segundos y 300 km/h en 21,4 segundos. Si eso no impresiona, mejor ver distancias de frenado, 200-0 km/h en 117 metros (4,6 s) y 100-0 km/h en 29,7 metros (2,8 s). Ni uno de los mejores coches del planeta puede escapar a la dictadura de la física ¡pero son distancias excelentemente cortas! La velocidad punta es de 341 km/h. La homologación es de 10,7 l/100 km, que me parece un miniconsumo en relación a lo que es capaz de hacer ese motor.


No se puede explicar ese rendimiento sin saber qué tiene en el chasis. Cuenta con suspensión de doble trapecio con control activo (Proactive Chassis Control II o PCC II), frenos carbonocerámicos de 390 mm delante y 380 mm detrás, y apisonadoras neumáticas: 245/35 R19 delante, 305/30 R20 detrás. Ahora se entiende mejor lo del 200-0 km/h. El trabajo en aerodinámica hace el resto, cuando un coche está bien diseñado, se nota, y de qué manera. El fabricante dice que mejora notablemente al 650S. Lo creemos, lo creemos. Es más rápido, más ligero, más potente, más todo.


Esta joya de la automoción vale casi 210.000 libras en Reino Unido, que parece una auténtica ganga tras haber visto la ficha técnica. Casi estoy por decir que me parece barato, y sin haber catado el Beefeater. God save the king. Los primeros afortunados en poder pagarlo y poder disfrutarlo tendrán las llaves en mano en mayo. Ya es primavera en el Corte Inglés. Ah, y aunque no es lo más importante, hay que hablar de los cueros nivel Maribel o piezas de aluminio mecanizado en el interior, aunque lo más seguro nos daría igual que el interior fuese by Dacia.

McLaren 720S, un canto a la perfección hecha coche

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