A pesar de pelear en el conservador segmento C premium (feudo de Audi, BMW y Mercedes), Infiniti se arriesga con un diseño llamativo y dotando al Q30 de un aspecto casi de crossover. De hecho, tiene una altura libre de 17 cm (similar a la de un SEAT Léon X-Perience). De manera acertada, estará disponible con tracción delantera e integral, según las versiones. La idea es atraer a los compradores de SUV y no el cliente tradicional de un compacto, premium o no. Y es que en el fondo, un BMW Serie 1, un Audi A3 o un Mercedes Clase A son propuestas conservadoras.
No es un secreto, el Mercedes Clase A y el Infiniti Q30 comparten plataforma e incluso numerosos elementos del interior (partes del salpicadero, asientos semibaquets). Lógicamente también tendrán motorizaciones en común, como la que culminará la gama Q30. Se trata de un 4 cilindros gasolina de 2.0 litros turbo y 208 CV que irá asociado a un cambio manual de 6 relaciones o la automática de doble embrague y 7 relaciones que también equipa los Clase A, CLA y GLA.
El resto de motorizaciones del Q30 se compone de dos motores gasolina de 1.6 litros de cilindrada, de 120 y 154 CV, y dos propulsores diésel, de 1.5 litros 107 CV y 2.2 litros de 168 CV. Estéticamente, las versiones más equipadas y deportivas tendrán un aspecto más urbano y deportivo, mientras que en las otras se resaltará el aspecto aventurero con pequeñas protecciones de plástico negro en los parachoques. (En las fotos, la unidad gris es el 2.0 litros turbo y tracción integral, mientras que la unidad de color bronce es la 2.2 diésel).
Del Mercedes Clase A, el Q30 recupera también la suspensión delantera McPherson y la trasera multibrazos. Obviamente, la puesta a punto de las suspensiones es específica a Infiniti. Hablando de los elementos de rodadura, la firma con sede en Hong-Kong anuncia una insonorización 10 % superior a la de sus mejores rivales. En el caso del 2.2 diésel (un propulsor notoriamente sonoro), el Q30 equipará el sistema Active Noise Cancellation (el sistema emite bajas frecuencias a través de los altavoces del coche para anular el ruido procedente del exterior y del motor). Del mismo modo, en algunos acabados, el Q30 utilizará el Active Sound Enhancement para simular una sonoridad deportiva.
El Q30 será el primer Infiniti fabricado en Europa, saldrá de la factoría Nissan de Sunderland, en el Reino Unido. Para Inifiniti, el Q30 es un modelo clave. Y es que en Europa (no contamos Rusia) Infiniti no acaba de despegar. Entre el desconocimiento de la marca por parte del público objetivo, la falta de imagen en general y una red de distribución todavía en fase de expansión, Infiniti necesita un modelo premium más accesible que las tradicionales berlinas (Q70 y Q50) y los SUVs (QX70 y QX50). En ese sentido, la decisión de compartir el desarrollo del modelo con un fabricante que dispone de una plataforma que ha demostrado ser un éxito y que ofrece una gran versatilidad es todo un acierto.
