Solo es igual el maletero, parabrisas y capota; el resto ha sido revisado
La gama se divide en dos modelos, 718 Boxster y 718 Boxster S. Visualmente se pueden distinguir fácilmente por unas tomas de aire más grandes, faros bixenón con luces diurnas LED (100% LED opcionalmente), tiradores de las puertas integrados en la carrocería, nuevas llantas de aleación y las ópticas posteriores con efecto 3D. Entre las mismas tiene una franja con el logotipo de Porsche integrado. Los neumáticos son de 19 pulgadas, pero opcionalmente pueden ser de 20 pulgadas.
El nombre viene de una familia de deportivos que se vendieron entre finales de los 50 y principios de los 60, con motores de cuatro cilindros. Las distintas versiones tienen notables diferencias, dependiendo del reglamento de las competiciones para las que se prepararon. Los modelos de esa época eran más pequeñitos, 1.5-1.6, con cuatro árboles de levas y cuatro carburadores Weber. Los nuevos, obviamente, son de inyección directa de gasolina.
Nuevos motores de cuatro cilindros bóxer
El 718 Boxster tiene un motor 2.0 con 300 CV de potencia y 380 Nm de par máximo, por lo que rinde más músculo que el Boxster S 3.4 que estaba antes. En el mejor de los casos -con caja de cambios PDK y el paquete Sport Chrono- acelera a 100 km/h en 4,7 segundos (0,8 menos). Este propulsor tiene un turbocompresor de geometría fija, entrega 100 Nm más que el 2.7 atmosférico, entre 1.950 y 4.500 RPM. Homologa 6,9 l/100 km de gasolina, un litro menos.
Por su parte, el 718 Boxster S monta un motor más grande, un 2.5, como el primer motor del Boxster (986) de la primera generación. Gracias al turbo de geometría variable eroga 350 CV y 420 Nm de par máximo, en el mismo rango que el motor de acceso. Está por encima del Boxster GTS, alcanza 100 km/h en 4,2 segundos (0,6 menos), también en el mejor caso. La homologación también es muy razonable, de 7,3 l/100 km de gasolina (0,9 menos).
La velocidad máxima del 718 Boxster es de 275 km/h, mientras que el 718 Boxster S llega a 285 km/h. De serie, el cambio manual es de seis velocidades, siendo opcional el PDK de doble embrage robotizado y siete velocidades.
Dado que con el cambio PDK no siempre hay una marcha idónea para las condiciones de circulación, se han sacado de la manga un sistema denominado «marchas virtuales», que engrana parcialmente los embragues de dos marchas contiguas, para simular una relación intermedia. Nos queda saber cómo puede afectar eso a la duración de los embragues, aunque conviene recordar que van bañados en aceite. Tan pronto se exige una fuerte aceleración, se acopla una única marcha con un único embrague. Esta función ya fue novedad en el 911 Carrera y 911 Turbo.
¡Qué bien! Si baja el consumo, bajarán también los precios por una menor presión de impuestos, ¿verdad? Siendo aguar la fiesta. El 718 Boxster cuesta 56.938 euros, y el 718 Boxster S 72.487 euros. Prácticamente es lo mismo que pedía Porsche por los Boxster y Boxster S, no hay ahorro, pero lo cierto es que se gana potencia y también algo de equipamiento. No salimos perdiendo, en definitiva.
El fabricante dice que ha revisado «totalmente» el chasis, con un rendimiento mejorado en las curvas. La dirección es un 10% más directa que antes. Los frenos son más eficaces, sin que Porsche detalle a qué se refieren exactamente. El Paquete Sport Chrono, además de los tres modos que ya tenía -Normal, Sport y Sport Plus- se añade el Individual para ponerlo a gusto del usuario.
También hay cambios en el sistema de suspensión adaptativo, denominado Porsche Active Suspension Management (PASM). Se puede pedir con una rebaja de altura de 10 mm, y en el caso del 718 Boxster S, también con 20 mm de rebaja. Porsche ha querido que se note más la diferencia entre el modo de uso de confort y el más deportivo.
Interior mejorado y más comunicado
La principal novedad está en el tablero de instrumentos y en el Porsche Communication Management (PCM), que viene de serie. Ofrece conectividad Bluetooth con teléfonos móviles, siendo opcionales las funciones de navegación con reconocimiento de voz, y también el paquete Connect Plus para acceder a Internet y disfrutar de servicios conectados. Con el Paquete de Sonido Plus, la potencia del equipo de sonido asciende a 110 W.
Otra novedad, solo para los automáticos, es el botón «Sport Response» inspirado en coches de competición. Sirve para cambiar los programas de respuesta del motor y el propio cambio. Se ubica en el volante, en la posición sureste. Por cierto, el volante se parece al del nuevo 911.
El lanzamiento comercial se producirá el 30 de abril, después del Salón de Ginebra y el de Nueva York.
