En primer lugar, pesa sólo 970 kg. Eso es un ahorro masivo de 80 kg en comparación con el último Swift Sport, que ya se sentía bastante ligero. Aunque el nuevo es 40 mm más amplio, Suzuki dice que su nueva plataforma es la clave para un rendimiento sublime. En algo se tiene que notar la mejora en el acero, obviamente. No va mal tampoco de motor, ahora con turbocompresor.
Sí, orad en silencio por la última pelotilla atmosférica. Sin embargo, observando las especificaciones, veremos que el motor 1.4 Boosterjet (K14C DITC) del nuevo Swift Sport desarrolla 140 CV, sólo 4 CV más que antes. No temáis, mas no necesita más potencia cuando el cuadro de instrumentos se tiñe de rojo (eso tiene que valer 50 CV como mínimo). Es casi la misma potencia, pero con menos peso, y con un incremento importante del par máximo.
Afortunadamente, ese dato es ahora muy superior, de 230 Nm entre 2.500 y 3.500 rpm, superando por tanto a coches como el Toyota GT 86 en la relación peso/potencia. A pesar de que sea un motor turboalimentado, Suzuki promete que seguirá siendo un coche al que le gustará seguir yendo alto de vueltas. Este Swift Sport más ligero y más potente debería sentirse muy bien sobre carreteras reviradas. No hace falta decir que se ofrecerá con una caja de cambios manual de seis relaciones cerradas. Desgraciadamente, la marca aún no ha revelado los tiempos de aceleración ni la velocidad máxima.
La suspensión ha sido revisada al completo, con barras estabilizadoras más rígidas y cojinetes de rueda más espaciados. Junto con los amortiguadores Monroe, el resultado es un aumento del 15% en rígidez torsional, algo a tener muy en cuenta cuando se toman las curvas a fuego. Por su parte, en el eje trasero se ha buscado mejorar la estabilidad, especialmente a alta velocidad. En él, mejora la rigidez en 1,4 veces respecto a su antecesor.
La distancia entre ejes es 20 mm más larga que en el Swift Sport anterior, mientras que las vías delantera y trasera son 40 mm más anchas, lo que incrementa la estabilidad lineal. En conexión con la idea de diseño centrada en el comportamiento del vehículo y la conexión emocional, la carrocería es 15 mm más baja y 40 mm más ancha, con lo que se crea una apariencia más atlética y robusta.
En el apartado estético poco se puede decir. Cuenta con todos los ingredientes para que se parezca -y sea- todo un hot hatch: paragolpes más agresivos, doble salida de escape, las llantas de aluminio de 17 pulgadas en acabado diamante, el spoiler trasero, el difusor o colores tan llamativos como el Champion Yellow 4 o el Azul Speedy Metalizado. El interior del Suzuki Swift Sport 2018 recibe las mejoras que ya monta el resto de la gama Suzuki Swift 2018, aunque con elementos nuevos como los toques de color rojo enfatizando la sensación de dinamismo.
Por supuesto, el Suzuki Swift incorpora mucha tecnología tanto en el apartado de entretenimiento (navegador 3D, Apple Car Play, pantalla táctil de 7 pulgadas, etc) como en el de seguridad, con sistema de frenada automática de emergencia, sistema de alerta de cambio involuntario de carril, control de crucero adaptativo o luces largas automáticas. Sorprendente por lo que piden por él.
Esperemos que Suzuki haya mantenido el equilibrio brillantemente accesible de su última creación, en lugar de concentrarse en crecer. Lo esperamos ansiosos a finales de este año.
