El verano pasado, los titulares de reservas del Model 3 comenzaron a recibir correos electrónicos de Tesla de que pueden recibir sus autos mucho antes si optan por la versión con batería LFP (ferrofosfato de litio) en lugar de las tradicionales unidades NCA (Nickel-Cobalt-Aluminum Oxide) de la planta de Fremont. Tesla fabrica el Modelo 3 con baterías LFP en su fábrica de Shanghái en China, y debido a que el hierro es más barato y más abundante que el que hay en los paquetes NCA, puede producirlos mucho más rápido. Aquellos en América del Norte que optaron por la entrega anticipada comenzaron a recibir sus nuevos autos Tesla en enero, pero las peculiaridades de los sistemas de batería LFP comenzaron a mostrarse poco después. Elon Musk está registrado defendiendo el cambio a baterías LFP para sus vehículos eléctricos de rango regular con el siguiente argumento:
Las principales diferencias a considerar son que la batería LFP tiene un alcance ligeramente más corto, 253 millas, que la batería NCA, 263 millas. Pero esta ligera diferencia en el rango es engañosa. La batería NCA probablemente no debería estar cargada al 100%. La carga completa de la batería causará daños a la batería que pueden deteriorarse con los años de propiedad. Está perfectamente bien cargar la batería LFP al 100 %, por lo que la experiencia de conducción es prácticamente la misma excepto por un par de advertencias.
Una de esas advertencias parece ser que los conductores se quedan varados por problemas de calibración de la batería LFP, lo que resulta en una estimación incorrecta del rango y baterías de 12V agotadas. Tesla acaba de pasar a baterías de iones de litio de 12 V para las ventanas eléctricas del automóvil o el sistema de infoentretenimiento de las viejas baterías de plomo-ácido, pero incluso los nuevos paquetes cayeron el fantasma 20 minutos después de que la batería principal LFP mostrara menos del 10% de carga restante, como ejemplificado por el comentario de un propietario.
Este problema exacto le sucedió a mi nuevo modelo 3 hace unas semanas. El primer día que obtuve el auto tuve que manejar 150 millas. El kilometraje decía 250 cuando recogí el auto de Tesla. La batería comenzó a caer precipitadamente, de camino a casa comencé a redirigirme a un súper cargador. Todavía tenía 20 millas en la batería y 10 millas para llegar al cargador. Apagué toda la calefacción y he estado conduciendo a 50 mph desde hace unos 10 minutos. El automóvil murió a una milla de distancia del supercargador en el medio de la carretera mientras la pantalla decía que quedaban 5 millas de batería. Nos dejó varados a las 12 am en medio de la carretera. Los policías llamaron a una grúa, nos remolcaron hasta el supercargador, pero el automóvil estaba completamente muerto en ese momento y ni siquiera se podía cargar. Tuve que dejar el auto con supercargador durante la noche con la ventana abierta hasta que Tesla pudiera remolcarme a la mañana siguiente. Después de unos días, Tesla me dijo que mi automóvil estaba bien y que no pasaba nada, después de que pedí hablar con el técnico o se negaron a recogerlo, finalmente lo dejaron hablar conmigo un par de días después. Dijo que la batería no estaba calibrada como se menciona en este artículo, me alegro de que esté recibiendo la atención que merece.
Lo que Tesla ofrece ahora es que los propietarios de sus automóviles con baterías LFP las carguen al 100 % al menos una vez a la semana y advierte que incluso establecer el límite de carga al 100 % en todo momento no dañará el paquete LFP a largo plazo. Este es el mensaje que estos propietarios recibieron recientemente:
El límite de carga en su vehículo se ha ajustado automáticamente al 100%. Se está calibrando la pantalla de alcance de su vehículo. Hasta que se calibre, el rango que se muestra está por debajo o por encima de la estimación en relación con la distancia recorrida. Para mejorar la precisión, cargue al 100%. Se recomienda para esta configuración de vehículo mantener el límite de carga establecido al 100 %, incluso para uso diario, y cargar completamente al 100 % al menos una vez a la semana.
Volocopter tiene como objetivo ayudar a evitar el tráfico de manera sostenible, con tres vehículos eléctricos diferentes hasta el momento, incluidos dos para pasajeros: VoloCity y VoloConnect. El VoloCity puede viajar hasta ~22 millas (35 km) a una velocidad de crucero de 56 mph (90 km/h). El VoloConnect, diseñado para viajes más largos, puede viajar hasta ~62 millas (100 km) entre cargas con la capacidad de navegar a 112 mph (180 kph). El tercer vehículo es un dron de carga, el VoloDrone, que puede viajar hasta ~25 millas (40 km)
La compañía afirma ser la primera compañía eléctrica de despegue y aterrizaje vertical en recibir la aprobación de la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea. Hasta el momento, la compañía ha realizado alrededor de 1.000 vuelos de prueba públicos y privados
Volocopter dijo que espera tener vuelos comerciales a París a tiempo para los Juegos Olímpicos de 2024. La compañía también planea lanzar su servicio a Singapur en 2024, comenzando con una ruta turística de Marina Bay. La compañía espera expandirse a 6 VoloPorts en Singapur para fines de la década.
Si bien los primeros vuelos serán piloteados, Volocopter ha explorado vehículos autónomos en el pasado. Por ejemplo, en 2017, la compañía realizó su primera prueba de autos voladores autónomos en Dubái. La compañía dijo que los vuelos autónomos son un objetivo a largo plazo, ya que cree que "la aceptación pública será más fácil con los vuelos tripulados".
![¿Se puede iniciar un Tesla? [Guía paso por paso]](/images/posts/b0f6a617b85388ab19d5cdbcaeecf3e0-0.jpg)
