Bombas de calor de bloque para autos Tesla: hay un retiro oficial

Un error de software, que se puede solucionar con una simple actualización, reduce la eficacia del sistema de descongelación del parabrisas, lo que hace que la visibilidad de la carretera sea potencialmente crítica y evita que el habitáculo se caliente.

Coches eléctricos

Son poco más de 26.000, en concreto 26.681, los coches Tesla sujetos a un nueva campaña de retirada en América del Norte: de estos, solo alrededor del 1% podría verse afectado por un mal funcionamiento. De hecho, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras ha destacado la necesidad de que estos vehículos Tesla intervengan para resolver un posible problema de software que podría provocar una reducción de la visibilidad del parabrisas en determinadas condiciones de uso, con posibles repercusiones en términos de seguridad en la conducción. .

¿Qué sucede en la práctica? Un error de software puede hacer que una válvula de la bomba de calor se abra de forma no intencionada y que el refrigerante quede atrapado dentro del evaporador, lo que puede reducir la visibilidad a nivel del parabrisas y reducir el rendimiento del descongelador. De esta forma, las lunas no estarían en las condiciones ideales, reduciendo la visibilidad del conductor con el potencial riesgo de accidente. Aparte de esto el sistema de calefacción interno del automóvil también se apagaría, ya no le permite climatizar el habitáculo.

El retiro se refiere a los automóviles. modelo 3 de la serie 2021 y 2022, a coches Modelo S, modelo X así como Modelo Y de los años de 2020 a 2022: son todos los modelos equipados con bomba de calor, combinados con versión de firmware de 2021.44 a 2021.44.30.6. Para abordar este posible problema se requerirá una simple actualización de software, que Tesla llevará a cabo por aire sin necesidad de llamar los vehículos al taller.

El retiro del mercado se refiere a los automóviles vendidos en los EE. UU., pero es obvio que Tesla extenderá la actualización del software, como siempre ocurre en estos casos, a todos los automóviles potencialmente sujetos al mal funcionamiento, independientemente del mercado en el que se vendieron. Sin embargo, cabe señalar cómo este error de software ocurre cuando el automóvil se usa en condiciones climáticas extremas, con temperaturas de al menos 10 grados bajo cero o menos.