¿Qué hace y para qué sirve la correa de distribución?
La correa de distribución es una de las partes más importantes de cualquier motor. Se utiliza para sincronizar el cigüeñal con el árbol de levas. En pocas palabras, la correa de distribución permite que las diferentes partes del motor trabajen en sintonía, abriéndose y cerrándose en el momento adecuado. Esta sintonía permite que el motor libere, "bajo control", la energía de la combustión del combustible y la transmita a las ruedas.
La correa de distribución está hecha de un material plástico/caucho que la hace flexible y le permite soportar los continuos esfuerzos y tensiones resultantes del movimiento de los engranajes. Al funcionar muy cerca del motor, la correa sufre grandes cambios de temperatura. La tensión, el estrés y las altas temperaturas a la larga "secan" el material plástico del que está compuesto el cinturón y causan desgarros o daños.
Cuando el desgaste es excesivo, la correa no puede ser reparada pero la correa de distribución debe ser cambiada. De esta manera se instala una nueva correa que permite la perfecta sincronización del motor y evita daños en válvulas y pistones.
¿Con qué frecuencia cambia la correa de distribución?
En el manual de instrucciones de cada coche se indica claramente la vida exacta de la correa de distribución expresada en años o kilómetros. Esto se debe a que los cinturones producidos hoy en día no dan ninguna indicación o síntoma de que estén dañados o desgarrados. En el pasado también se vendían "cinturones ruidosos" que hacían un claro ruido cuando empezaban a desgastarse demasiado, advirtiendo al conductor que había que sustituirlos.
En principio, sin embargo, la correa de distribución debe ser cambiada:
- Entre 100.000 y 180.000 km...
- Cada 5 o 6 años
¿Qué pasa con la correa de distribución rota?
Como ya se ha mencionado, la correa juega el papel crucial de sincronizar las partes internas del motor. En cuanto la correa de distribución se rompe o se daña, la sincronización falla y los componentes internos del motor ya no pueden funcionar correctamente y chocan entre sí. El desgarro de la correa casi siempre resulta en graves daños al motor, cuya reparación costará varios miles de euros. Estos daños incluyen rotura de pistón y válvula, rotura de cigüeñal y/o árbol de levas y fallo de la bomba de agua.
Los graves daños que la correa de distribución rota (o incluso simplemente dañada) causa a la máquina deberían ser suficientes para inducir incluso a los más obstinados a cumplir los plazos exactos de sustitución de la correa de distribución.
Es útil saber cuáles son los síntomas de una correa de distribución rota. De esta manera, si aparece uno de estos síntomas, sabremos cómo reaccionar con prontitud, evitando empeorar la situación o crear problemas a las partes internas del motor. La mejor prevención para una correa de distribución rota es siempre sustituir la correa de distribución en los plazos prescritos.
¿Cuánto cuesta la sustitución de la correa de distribución?
Normalmente el coste de la sustitución de la correa de distribución es de unos 400 y 600 euros para una máquina de gama media, entre piezas de repuesto y mano de obra. En algunos modelos de coches de lujo el coste de cambiar la correa de distribución puede llegar a los 1000 euros.
Cuanto más grande sea el automóvil, más difícil puede resultar físicamente llegar a la correa de distribución y sustituirla, lo que aumenta el costo de la intervención debido a las muchas más horas de trabajo que se requieren para realizar la sustitución de la correa de distribución. Pero si pensabas que estaba aquí, te equivocas.
El costo de cambiar la correa de distribución puede irónicamente ser más caro para un coche pequeño que para un coche muy grande. Si bien es cierto que los coches más grandes tienden a costar más para cambiar la correa de distribución, hay excepciones a la regla. Algunos coches grandes, que suelen ser de producción americana, tienen espacios muy generosos gracias a los cuales el mecánico puede alcanzar la correa de distribución con facilidad.
Por el contrario, algunos microcoches urbanos europeos tienen espacios muy estrechos que obligan al mecánico a retirar muchas piezas o incluso a levantar el motor sólo para llegar a la correa. Por consiguiente, el precio del cambio de la correa de distribución puede aumentar hasta tal punto que, en el caso de un automóvil particularmente antiguo, puede superar el precio del propio automóvil.
Si está pensando en comprar un coche de segunda mano, compruebe siempre el estado de la correa de distribución porque la única está a la vuelta de la esquina (o quizás sería mejor decir bajo el capó?).
¿Cómo ahorrar dinero en el cambio de la correa de distribución?
Empecemos diciendo que nuestro consejo es que nunca descuides la correa de distribución de tu coche. Siempre respeta el tiempo de la correa de distribución camhio. Quieres porque las compañías matrices describen los coches como objetos que no necesitan mantenimiento, un poco como los teléfonos inteligentes, quieres que siempre estemos ocupados con la rutina, cambiar la correa de distribución de acuerdo con el tiempo correcto es la mejor manera de ahorrar en el mantenimiento de nuestro coche.
El precio de la correa de distribución puede parecerle alto e insignificante. Sin embargo, recuerde que romper el cinturón o dañarlo resultará en más de 4 o 5 veces el costo de reemplazo. Si quieres gastar menos, nuestro mejor consejo es elegir un buen mecánico independiente donde puedes ahorrar hasta un 20% comparado con el coste de los garajes de la empresa matriz.
Encontrar un buen mecánico independiente puede no ser fácil. Mucha gente tiene miedo de terminar siendo engañada por ladrones y maleantes o de conseguir un mal trabajo que cause mayores problemas en lugar de resolverlos. Precisamente por eso hemos creado Pistonudos, un servicio único en Italia que le permite encontrar un buen mecánico en sus cercanías. Gracias a nuestra red de talleres independientes estrictamente seleccionados por nosotros, puede estar seguro de que el trabajo está bien hecho. Además, como ya se ha mencionado, se ahorra hasta un 20% en el coste de la sustitución de la correa de distribución.
