Hennessey es un preparador tejano que hace magia con algunos coches. El Venom GT es una modificación extrema del Lotus Elise, al que se le calza un motor 7.0 V8 LS3 de origen General Motors y dos turbocompresores, entre otras chuches. El resultado supera los 1.450 CV, que a veces es más de la potencia acumulada en un concesionario completo de coches de marcas generalistas.
La producción de esta maravilla ha terminado después de seis unidades con techo duro, seis roadster y el prototipo inicial. El último, llamado “Final Edition”, ha salido de esta guisa, con el color Azul Glacial y un par de bandas blancas en el centro. El afortunado dueño ha pagado por él un poco más de millón de euros al cambio (1,2 millones de dólares).
El Venom GT se despide como uno de los coches más rápidos del mundo. Ganó el título del biplaza más rápido en 2014 (435,31 km/h) y el descapotable más rápido en 2016 (427,44 km/h). Lees bien, más de 420 jodidos kilómetros por hora. El próximo modelo, el Venom F5, también será un coche de producción muy limitada y muy caro. Tendrá por lo menos 1.500 CV, una punta de 467 km/h y acelerará a 100 km/h en unos dos segundos.
¿Producto de tu imaginación? No, de la potencia americana con un poco de gimnasio.
- Jose Escanilla
- http://4wheels4fun.net/ Ander Arribillaga